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La revolución del trabajo en remoto

2 de febrero de 2022
La revolución del trabajo en remoto

¿Cómo nos hemos adaptado al teletrabajo?

 

A raíz de la crisis sanitaria provocada por la COVID-19 en marzo del 2020, gran parte de las empresas se han visto obligadas a implantar el sistema del trabajo en remoto. INDIZE no se ha quedado atrás, y es por eso por lo que hoy venimos a contaros cómo se ha adaptado nuestro día a día, a esta nueva era de trabajo digitalizado.

Actualmente se distinguen tres tipos de modalidades de trabajo: Totalmente presencial, totalmente remoto o una modalidad mixta, en la que se combina presencialidad con teletrabajo. Esta última modalidad es la que actualmente está tomando mayor presencia en el mercado y la que desde INDIZE hemos implantado.

En este tipo de modalidad, se garantiza una combinación de turnos asegurando que en cada departamento siempre haya personal atendiendo las oficinas físicas, y al mismo tiempo se le dé la oportunidad al empleado/a del beneficio del teletrabajo.

¿Qué beneficios encontramos por parte del empleado/a?

Ahorro en tiempo: El tiempo promedio ahorrado con la implantación del teletrabajo es entre 1 y 3 horas diarias entre ir y volver a la oficina. Ese tiempo invertido no computa como horas laborales, sino que se resta directamente del tiempo libre; es por eso por lo que se establece como principal beneficio del teletrabajo. Ganar en tiempo es ganar en calidad de vida.

Ahorro en coste: El coste económico invertido en el traslado a la oficina diariamente es muy elevado, ya sea en vehículo propio o en transporte público. Por otro lado, existen otro tipo de costes derivados de dietas, así como en indumentaria laboral.
Es por eso por lo que en el caso del teletrabajo estos gastos se reducen considerablemente; no es necesario traslado, una indumentaria concreta, ni tampoco la obligación de consumir o dedicar tiempo a la preparación del menú semanal.

Productividad: Existen estudios que demuestran que cuanto más feliz es un trabajador/a en el desempeño de su puesto de trabajo, más productivo/a es, repercutiendo directamente en los resultados de la propia empresa. El hecho de tener la posibilidad de trabajar desde casa o desde cualquier parte del mundo hace que nuestro estado de ánimo se vea beneficiado.

Sin embargo, no todo lo que luce es oro, hay situaciones en las que el teletrabajo ha afectado negativamente al puesto.

¿Qué tipo de inconvenientes nos hemos encontrado?

Soledad: Desde el inicio de la pandemia se ha visto incrementado el llamado “Síndrome de la Cabaña”, basado en la irritabilidad o inquietud claustrofóbica que se experimenta cuando una persona, durante un período prolongado en el tiempo pasa en un lugar aislado o en un lugar cerrado.
Para evitar este síndrome se recomienda que el lugar donde se teletrabaja sea agradable y estar a nuestro gusto; así como tener un lugar fijo destinado a nuestro puesto de trabajo. Por otro lado, realizar las mismas pautas como si se acudiera a la oficina en cuanto a indumentaria y aseo personal, ya que puede ayudar positivamente a nuestra salud mental frente al teletrabajo.

Incompatibilidad: Se dan circunstancias en la que el hecho de teletrabajar permite otra serie de situaciones, que en el caso de estar en oficina no podrían darse; como, por ejemplo: Cuidado de un menor o de una persona dependiente.
Estas situaciones hacen que el ambiente de trabajo no sea el más adecuado, imposibilitando la concentración y enfoque en el puesto.
En este tipo de casos (siempre que la situación lo permita), se ha fomentado más la presencialidad.

¿Qué medidas hemos adoptado para implementar el teletrabajo?

A partir del lunes 16 de marzo de 2020 se comienza a realizar teletrabajo, sumándose en los siguientes días todos los trabajadores quienes sus labores no exigen presencialidad.

Se facilitan los medios para la realización del trabajo a distancia, implementando mejoras tecnológicas progresivas a partir de ahí hasta la actualidad:

  • Acceso a puertos remoto, mismos que se empezaron a sustituir por accesos al servidor a través de VPN.
  • Migración al sistema Outlook y todo lo asociado al paquete Microsoft 365, especialmente TEAMS como herramienta de trabajo colaborativa y de comunicación grupal.
  • Compra de teléfonos y redirección de llamadas a los mismos, sustituidos posteriormente con la implementación de una centralita virtual en el propio portátil (VozIP).
  • Compra y entrega de portátiles, teclados, ratones y pantallas a cada trabajador.
  • Fichaje telemático a través de la intranet  Innocualificados. Con ello por una parte se evitaba que quienes acudían presencialmente no tocaran el terminal para evitar contagios, y por otra facilitar el registro de horas laborales de quienes se sumaron al teletrabajo.

Por todo esto, podemos concluir que el trabajo remoto, es algo que en gran medida resulta positivo y beneficioso para ambas partes; no obstante, es determinante fijar unos objetivos bien definidos y adaptarlo según la situación de cada trabajador/a.

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